A comienzos de este cuatrimestre, en el que tanto retraso llevamos, se ha incorporado a las clases de Ética y filosofía política, de forma regular, un grupo de personas procedentes de una experiencia puesta en marcha en la Universidad de A Coruña denominada Universidad Senior, que comparte clases con los jóvenes alumnos ordinarios de 3º de Humanidades.
Todavía hay poca interacción entre ellos, pero el experimento es muy gratificante, ya que se mezclan alumnos que buscan aprender pero también un título con alumnos que simplemente desean aprender.
La motivación "pura" hacia el conocimiento, tan extraña hoy día, debería actuar como un revulsivo para la eliminación de todos aquellos elementos "bastardos" del aprendizaje que tanto contaminan la Universidad española actual.
Aprender por aprender, conocer por disfrutar, indagar por diversión, por puro divertimento gratificante. Si ese fuera el espíritu imperante en las aulas universitarias, a buen seguro a medio plazo mejoraría incluso el rendimiento académico.En todo caso, mis "nuevos" alumnos se han medio quejado de que la avalancha de referencias los inunda y desborda. Intentaremos seguir trasmitiendo el mismo número de conceptos, pero con menos farfolla bibliográfica. Más ideas y menos libros. ¡A ver!
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